La elección final, de Gennifer Albin

La elección final
Unraveled | Gennifer Albin
Alfaguara | 9788420419008 | 328 páginas | 17,95€
Bookdepository (en inglés): 10,94€
Trilogía Las tejedoras de destinos:
1. Las tejedoras de destinos | 2. Entre dos mundos | 3. La elección final

Libre. Independiente. Peligrosa. Intentaron controlarla. Y ahora los destruirá. NADA ME FRENA ahora. Y por ello la Corporación debería temerme. He renunciado a todo. No tengo nada más que perder. Soy capaz de salvar mundos, y lo haré. Tal vez la Corporación permanezca al acecho, pero estoy preparada para enfrentarme a ello s.Las cosas están cambiando tras los muros del Conventry y nuevas conspiraciones comienzan a tejerse en sus intrincados pasillos. Cuando Adelice regresa a Arras, pronto comprende que algo despreciable y oscuro ha tomado el control sobre el mundo... y que Cormac Patton la necesita para restablecer el orden. Sin embargo, la paz exige un precio demasiado alto. Mientras la Corporación sigue manipulando a los ciudadanos de Arras, Adelice descubre que no está sola, y que deberá olvidar el pasado para luchar por la salvación de su mundo. Ha llegado el momento de elegir entre una inimaginable alianza y una cruenta guerra que podría destruirla a ella, y también su amor.

OPINIÓN

Ha tocado poner fin a una trilogía juvenil que llegó a mis estanterías hace un par de años. Me gustó el primer libro porque me parecía original. La idea de un mundo que pudiera tejerse por unas cuantas personas, en este caso mujeres, que eran capaces de ver y moldear las hebras por las que estaba formada Arras, me parecía un punto muy fuerte de la historia. Algo que destilaba machismo, control y manipulación, y que apuntaba a cambios y revoluciones. Sin embargo, la decadencia en la que han ido cayendo paulatinamente cada uno de los libros, ha resultado totalmente decepcionante. No me voy a parar a resumir el contenido de este libro, sino que voy a empezar directamente a justificaros mi opinión.

Me ha pasado algo bastante curioso con esta trilogía. Normalmente tengo una memoria malísima, y por lo general, se me olvidan muchos detalles de un libro a otro dentro de una misma saga. No obstante, siempre voy recordando cosas, personajes, hechos que ya habían sucedido. En cambio con Las tejedoras de destinos no ha sido así. Leí Entre dos mundos (su segunda parte) totalmente confusa, porque apenas recordaba cosas del primero, y es curioso porque al leer esta tercera parte recordaba más del primero que del segundo. No le busquéis la lógica, porque no lo entiendo ni yo. La conclusión de esto es que de nuevo, he vuelto a sentir esa sensación de confusión y desorientación mientras leía esta novela, especialmente con las historias paralelas de ciertos personajes secundarios, algunos que ya no tienen cabida en este libro porque habían fallecido o simplemente aquí no tienen importancia.

Entre las cosas positivas, destacaré que es un libro muy fácil de leer, es realmente ameno y el estilo sencillo de la autora facilita mucho el proceso de lectura. Precisamente es la narración de Gennifer Albin la que en este libro me ha decepcionado mucho. No sé si en todos ha sido igual, o es porque he leído cosas más elaboradas entre cada parte de la saga, pero me ha parecido que la pluma de la autora no tiene nada que la destaque de otras narraciones, y en ocasiones me ha resultado hasta simplona, aunque práctica porque siempre va al grano. No se entretiene en descripciones presuntuosas o muy elaboradas, sino que se ciñe a contar los hechos y poco más. No sé si será a causa de esto, pero en general y mientras leía el libro, he tenido la sensación de que la autora tenía ganas de acabar con todo como fuera, precipitándose en algunos acontecimientos y dejando poco espacio para los sentimientos y el desarrollo de los propios personajes.

Tampoco me ha gustado la poca coherencia de las acciones. Por ejemplo, y sin ser spoiler, están hablando de fenómenos espaciales (por llamarlos de alguna forma), y unos personajes están intentando explicarle a Adelice (que no sabe nada del tema) algunos de ellos con ejemplos y comparaciones. Y de repente, sin que nadie hubiera dicho nada, ella salta: ¡es un agujero negro! ¿En serio? No es capaz de saber cosas más sencillas, y sí es capaz de sacarse de la nada un término que nunca ha escuchado. Y esto, nubecillas, se repetía constantemente: personajes que no se han visto en su vida se llaman por su nombre sin que nadie los presente, y así sucesivamente, lo que ha restado mucha credibilidad a la historia, ha aumentado la confusión que sentía mientras lo leía y por supuesto, no me ha gustado en absoluto.

No obstante creo que sí ha habido un esfuerzo por parte de Gennifer de incorporar giros y sorpresas, como personajes que no son lo que parecen y situaciones que de repente dan vueltas de 180 grados. Pero cuando ya estás quedando desencantada con otros aspectos de la novela, esto deja de ser relevante.

Y luego en final. ¿Alguien me puede explicar de dónde se ha sacado este final la autora? De nuevo tuve esa sensación de que tenía que acabar como fuera, con una situación que le viniera bien a Adelice, la protagonista. Sin embargo, parece que queda algo que no se cree con facilidad, al menos en mi caso, y que pretende ser algo bonito, dejando espacio a que el lector intuya y suspire, y que no deja otra sensación que frialdad y más interrogantes.

Y ya paro.

En definitiva, La elección final me ha parecido un final bastante decepcionante para una trilogía distópica que pintaba muy bien al principio, y de la que se hubiera podido sacar mucho partido. Un final mal elaborado, la confusión y la sensación de que la autora estaba ansiosa por acabar como fuera la historia, me han acompañado en toda la lectura y no me han permitido disfrutar de ella. Es una pena, porque podrían haber sido tres libros maravillosos, y se han convertido en un lastre en mis estanterías.

Colaboración con Alfaguara.

El tiempo entre nosotros, de Tamara Ireland Stone

El tiempo entre nosotros
Time Between Us | Tamara Ireland Stone
Ediciones B | 9788493961336 | 376 páginas | 17,00€
Bookdepository (en inglés): 9,02€
Bilogía El tiempo entre nosotros:
1. El tiempo entre nosotros | 2. Una y otra vez

Anna Greene, suburbios de Chicago, 1995: gran amiga, amante de la música y atleta con sueños de viajar por el mundo.

Bennett Cooper, San Francisco, 2012: hermano entregado, asistente a conciertos, skater... y viajero en el tiempo.

A mundos de distancia, ellos dos no tenían por qué conocerse. Pero un incidente conduce a Bennett a la vida de Anna y ambos se embarcan en un viaje lleno de romance y aventuras, concientes de que lo que hacen podría acabar en un par de corazones rotos.

Bennett podría ser devuelto a su tiempo en cualquier momento. Con el tiempo en su contra, Anna y Bennett se ven obligados a preguntarse hasta dónde pueden forzar el destino, qué consecuencias están dispuestas a asumir por permanecer juntos y si su amor es lo bastante fuerte para enfrentarse a todas las pruebas.

OPINIÓN

Aunque no aluda mucho a ello constantemente, me intrigan mucho los viajes en el tiempo y todo lo relacionado con las consecuencias temporales de los actos de cada uno y similares. Creo que construir una historia basada en estos aspectos, puede ser realmente complicada, ya que hay que tener una cronología y un esquema de hechos muy claro y elaborado, para evitar entrar en incongruencias, y si bien esta novela no tiene problemas en ese sentido, he encontrado que cojeaba en otros. No obstante, es un libro que he disfrutado mucho y que recomiendo leer.

La historia se centra en Anna, una estudiante de instituto que practica atletismo y que además de estudiar y esforzarse en conseguir una buena beca para la universidad, ayuda en el negocio de su padre, que tiene una pequeña librería. Uno de los días en los que sale a correr, ve a un misterioso chico que parece reconocerla, pero que desaparece sin más delante suya. Cuando ese chico, Bennett, aparece en su instituto, como nuevo estudiante, no puede esconder la sorpresa. Llevada por la intriga y la confusión, se acerca a él para conocerlo y sin quererlo, ambos se enamoran. Pero su relación está avocada al desastre, porque no es una relación a distancia cualquiera: en vez de kilómetros (que también), les separan años, porque Anna vive en 1995 y Bennett en 2012. A pesar de este pequeño contratiempo, encuentran la forma de disfrutar del tiempo que tienen juntos.

Me ha gustado mucho el libro. Creo que funciona muy bien como una lectura juvenil romántica sin muchas pretensiones. La autora narra con mucha dulzura y cuidado cada acontecimiento que sucede, sin despreocupar el estilo y la caracterización de los personajes. Me ha gustado la relación de Anna y Bennett, y son personajes que, sin que vayan a ser inolvidables en mi experiencia lectora, sí que se han ganado mi cariño. Creo que el elemento “distancia por el tiempo” ha sido clave para aportar un toque de originalidad y atractivo para dicha relación. Sé que no es un recurso nuevo, por ejemplo, ya conocía la historia de La casa del lago (una película que os recomiendo mucho porque es preciosa), y seguro que hay otras cientos similares en literatura y cine, pero no por ello he dejado de disfrutar del libro ni un segundo. Como aspecto negativo a esta relación, no obstante, me gustaría señalar que peca un poco de tópica: chica conoce a chico y se enamoran casi de forma instantánea. ¡Un poco de novedad, por favor!

Vuelvo a aludir a los saltos en el tiempo y las consecuencias de los actos de los personajes. Aunque no es que haya cambios dramáticos y giros muy sorprendentes (otro aspecto negativo a destacar de la novela, en mi opinión), sí que la autora sabe darle alguna que otra vuelta de tuerca a la historia, jugando con las decisiones de los personajes y cambiando las repercusiones de los acontecimientos. Han sido estos pequeños giros, sutiles pero bien definidos, los que hicieron que me emocionara en algún que otro momento.

No obstante me decepcionó que el asunto misterioso de la novela (el motivo por el que Bennett viaja al pasado), se “resolviera” de forma muy floja y rápida. Creo que si la autora hubiera desarrollado más este elemento de su historia, y le hubiera dado más importancia, el libro habría ganado en riqueza y habría tenido una evolución más marcada y un desarrollo más impactante, de manera que hubiera compensado la poca evolución que sufren los personajes principales.

En definitiva, El tiempo entre nosotros ha sido una lectura muy agradable, con una historia de amor muy bonita, y que juega con los saltos y viajes en el tiempo de una forma muy acertada. Aunque me haya faltado más desarrollo y evolución de los personajes, he disfrutado mucho de cada una de sus páginas. Creo que es el libro perfecto para desconectar, emocionarse y perderse en un romance juvenil bastante bien llevado. 

Colaboración con Ediciones B.

Flora y Ulises, de Kate DiCamillo

Flora y Ulises: Las aventuras iluminadas
Flora & Ulises: The illuminated Adventures | Kate DiCamillo y K.G.Campbell
Océano Gran Travesía | 9788494258268 | 230 páginas | 17,90€
Libro autoconclusivo 

Todo comienza una tarde de verano en la cocina de la señora y el señor Tickham. Este último ha decidido regalarle a su esposa la más moderna y avanzada aspiradora del mundo. En cuanto conectan el aparato, éste se vuelve loco y empieza a tragarse todo lo que encuentra a su paso, incluyendo a una simpática ardilla llamada Ulises. Por fortuna, la cínica adolescente Flora está cerca y logra salvar al peludo animalito. Lo que ocurre a continuación es sorprendente: el accidente provoca que Ulises adquiera los poderes de un verdadero superhéroe. Una alocada aventura llena de humor, pero también de ternura que encantará a los jóvenes y a los adultos.

OPINIÓN

No dejo de preguntarme si esta editorial dejará algún día de publicar libros tan cuquis, bonitos y entrañables, especialmente los más infantiles, porque todos están llenos de personajes carismáticos, situaciones disparatadas y divertidas y mil aventuras que hacen que leerlos, sea toda una experiencia.

En serio, ¿quién no ha querido leer nunca una novela en la que uno de sus protagonistas fuera una ardilla superhéroe o una niña cínica que lee cómics? Esa ardilla es Ulises, y además de volar, entender todo lo que le dice Flora a la primera y pensar siempre, siempre, en comer, escribe poesía y tiene mucha fuerza. La conexión entre Flora y Ulises es palpable desde el primer momento, y se va fortaleciendo a medida que avanza la novela. La ardilla será el mecanismo que active a Flora, una niña a la que le cuesta mostrar sus sentimientos, y que continuamente se aísla de su entorno encerrada en su habitación y leyendo una y otra vez los cómics que solía compartir con su padre, antes de que éste y su madre se separaran.

Pero claro, para Flora las cosas tampoco son del todo fáciles. Su madre vive inmersa en la escritura de novelas románticas, así que se pasa las horas pegada a su máquina de escribir, y su padre es un señor algo empanado de la vida que no es capaz de tomar decisiones muy trascendentales, y lo que es peor, no se percata de la situación en la que se encuentra su hija. Aunque como llega Ulises para ponerlo todo patas arriba, además de William Spiver, un extraño chico de la edad de Flora, las cosas comienzan a cambiar para todos.

Me parece increíble como una historia tan disparatada, a la par que entrañable, pueda transmitir tantos mensajes positivos. Sin duda, este tipo de lecturas me parecen muy adecuadas para ciertos rangos de edad, porque no sólo son libros entretenidos, sino que podrían incitar a los más jóvenes a leer. Cuando te encuentras con personajes como Flora, Ulises y William Spiver, y situaciones tan inverosímiles pero a la vez tan lógicas en su contexto, es imposible no pensar en querer leer más para conocer más historias de este estilo. Y que esta novela se lee rapidísimo, engancha desde el primer momento y además logra una ambientación única en el lector, al intercalar el texto con las preciosas ilustraciones que acompañan a cada capítulo.

Ya comentaba además, que está lleno de mensajes buenos. En Flora y Ulises encontramos referencias tangibles a todo lo positivo que suponen para las personas, especialmente los niños por ser el público al que va dirigido este libro, tanto la familia como los amigos. Pero además, transmite muy bien el valor de la imaginación y el valor en algunos casos de los más pequeños, que tienen que enfrentarse a situaciones que no entienden del todo, sin perder la ilusión en el proceso.

Como punto flaco destacaría que Flora y Ulises es una obra poco profunda, aunque es de esperar, pero por otro lado (y aunque odie profundamente las comparaciones), el haber leído esta novela tan seguida de El verdadero significado del Smekdía (que me encantó), me ha parecido quizá un poco más floja en el desarrollo y la acción con respecto a la segunda.  Aunque como ya he comentado, pone de manifiesto valores y mensajes muy buenos que transmitir a los más pequeños.

En definitiva, Flora y Ulises es una entrañable y disparatada historia, perfecta para lectores más jóvenes y que destaca muchos valores, utilizando el humor y las aventuras de sus personajes, que son únicos.

Colaboración con Océano Gran Travesía.

El mar de la tranquilidad, de Katja Millay

El mar de la tranquilidad
The Sea of Tranquility | Katja Millay
Plataforma Neo | 9788416256846 | 456 páginas | 17,90€
Bookdepository (en inglés): 12,27€ 
Libro autoconclusivo 

La antigua prodigio del piano Nastya Kashnikov solo quiere dos cosas: terminar el instituto sin que nadie conozca su pasado y conseguir que el chico que se lo arrebató todo -su identidad, su espíritu, sus ganas de vivir- pague por lo que hizo. 
La historia de Josh Bennett no es ningún secreto. Cada persona que ha amado ha sido arrancada de su vida, y a los diecisiete años no le queda nadie. Ahora lo único que quiere es estar solo. Y parece que la gente comprende que no necesita compañía. Todos excepto Nastya, la misteriosa chica nueva del instituto, que poco a poco irá acercándose a él. Pero cuanto más llega a conocerla, mayor es el enigma. A medida que su relación se intensifica, las preguntas sin respuesta salen a la luz y él comienza a preguntarse si alguna vez sabrá quién es Nastya en realidad, o incluso si quiere descubrirlo. 
El mar de la Tranquilidad es una historia profunda y emotiva sobre el milagro de las segundas oportunidades.

OPINIÓN

Este libro ya me llamaba la atención desde antes de que se publicara en español, por lo que en cuanto me enteré de que la editorial lo traía a España, decidí que sería mi momento de leerlo. Y la verdad es que se ha convertido en una de las mejores lecturas que he hecho este año.

Si leéis la sinopsis, podréis pensar que es otra historia más de instituto. Me encanta cuando libros como este engañan, atrayendo a lectores que piensan que es “un libro juvenil más” y se encuentran con algo maravillosamente increíble. Aunque por otro lado me da pena, porque muchos otros dejarían pasar la oportunidad de leer algo así de estupendo.

El mar de la tranquilidad atrapa desde la primera página, porque ya desde ese momento podemos ver que, aunque parezca una historia “típica” no es “tópica”. La narración, los personajes y las trabas por las que tienen que pasar son sencillamente magníficos.

La historia está narrada en primera persona, desde las perspectivas de Natsya y Josh. Como siempre que podemos ponernos en la piel de los protagonistas, he vivido la historia mucho más de cerca, conociendo de primera mano las inquietudes de ambos jóvenes. El hermetismo de Natsya, lejos de ser irritante por las pocas claves que aporta con respecto a su pasado y todas las incógnitas que plantea, resulta muy intrigante y atrayente. La sensación de querer conocerla mejor, de descubrir qué es eso que le sucedió y que poco a poco va descubriendo al lector, y más tarde, a Josh, atrapa y mantiene al lector pegado al libro en todo momento. En todo esto está la única pega que le he visto a esta historia, y es el hecho de que Natsya se mueve poco para buscar a la persona que le hizo daño. Me hubiese gustado ver algo más de acción por su parte, que hubiera investigado más. En cuanto a Josh, es un chico misterioso (siempre hay chicos misteriosos) en apariencia, que también tiene que lidiar con su propio duelo. Y por último está Drew, un personaje muy peculiar, que es mucho más inteligente de lo que parece a simple vista y que le aporta un aire más distendido a la novela.

Todos los personajes sufren su propia evolución, pero lo que más me ha gustado ha sido la forma de ir desentrañando poco a poco los acontecimientos, las pistas sutiles al principio y más intensas después que se van dando de cada una de las vidas afectadas en esta historia. Es una novela juvenil y que además refleja muy bien el vocabulario propio de la edad, las alusiones sexuales que no conocen tabúes y también a otras referencias que tienen que ver con el día al día de los jóvenes. El estilo de la autora es único, y puede tanto describirte la escena más bonita y delicada, como hablar con dureza de cualquier otro acontecimiento.

Todo esto hace que El mar de la tranquilidad sea una de esas raras excepciones en la literatura juvenil, que es capaz de romper con tabúes y tópicos, a pesar de presentarse con una premisa precisamente típica. Es curioso cómo rompe moldes, atrapa al lector y le hace encariñarse de todos los personajes. Y el final, ESE FINAL. Me rompió en pedazos, me emocionó y me hizo soltar el doble de lágrimas que ya estaba derramando. Es increíble porque la autora consigue adelantarte el final sin que te des cuenta. Y cuando lo lees finalmente, todo encaja perfectamente, se te pone la piel de gallina, y te emocionas como un tonto/a. Es sencillamente precioso.

En definitiva, El mar de la tranquilidad es una excelente novela juvenil, que rompe moldes, tópicos y elimina tabúes, y que de forma delicada, directa y cruda a veces, desarrolla una historia de amor preciosa. Con sus dosis de misterio, una prosa cuidada y conmovedora, te lleva hasta un final que es capaz de dejarte sin aliento. Totalmente recomendado.

*Colaboración con Plataforma Neo.