Reseña: Días de sangre y resplandor

Días de sangre y resplandor

TÍTULO ORIGINAL: Days of Blood and Starlight

AUTORA: Laini Taylor

TRADUCTORA: Montserrat Nieto Sánchez

EDITORIAL: Alfaguara

NÚM. PÁGINAS: 523

PRECIO: 17,50 €

SAGA: Hija de humo y hueso (2/3)

1. Hija de humo y hueso | 2. Días de sangre y resplandor | 3. Dreams of Gods & Monsters

¡Cuidado! Puede contener spoilers de libros anteriores.

La estudiante de Arte y aprendiz de monstruos, Karou, tiene por fin las respuestas a las preguntas que se lleva haciendo desde niña: sabe quién es y, sobre todo, qué es. Pero junto a esta verdad, ha conocido otra mucho más dolorosa: el ser al que ama es su peor enemigo, responsable de la traición más terrible y del dolor de todo un mundo. En esta segunda parte de la mundialmente aclamada «Hija de humo y hueso», Karou deberá decidir hasta dónde es capaz de llegar para defender a su pueblo. Llena de dolor y belleza, secretos y decisiones imposibles, «Días de sangre y resplandor» encuentra a Karou y Akiva en dos bandos enfrentados cuando una antigua guerra vuelve a desatarse. Mientras Karou y sus compañeros construyen un ejército monstruoso en un mundo de polvo y resplandor, Akiva lleva a cabo otro tipo de batalla, la de su redención, la búsqueda de esperanza. Pero ¿puede la esperanza escapar de las cenizas de un sueño roto?

OPINIÓN

Cuando terminé Hija de humo y hueso tenía esa sensación de necesidad por leer su continuación. Si el primer libro me pareció original, este continúa en la línea, supera al anterior y me deja con ganas de más.

Después de que Akiva y Karou rompieran el hueso de la suerte y Karou descubriera qué había pasado con su familia quimera, es incapaz de permanecer junto a Akiva. La guerra ha terminado, al menos aparentemente, con la victoria de los serafines. Las pocas quimeras que quedan son esclavizadas, y reina la confusión y el miedo. Sin embargo, alguien está organizando una rebelión con quimeras resucitadas en cuerpos más grandes, destructivos y monstruosos, aportando verdadero sentido a los cuentos que los ángeles narran a sus niños. Pero pocos siguen encontrando sentido a una guerra que parecía acabada y que ahora, para colmo, amenaza el mundo de los humanos.

Si hay algún tipo de adjetivo que resuma mi sensación mientras leía el libro, son los de “angustia” y “sufrimiento”. La historia del primer libro es una chiquillada comparada con la que nos encontramos en Días de sangre y resplandor. La guerra no ha terminado, nadie puede confiar en nadie, hay miedo y abundan las mentiras. No hay ni un personaje prescindible, por secundario que pueda parecer en un momento, y algunos de ellos tendrán un papel muy importante en la próxima entrega, de eso no hay duda.

Es la vida tu dueña, o la muerte, había dicho Brimstone, pero en esos días sangrientos, no existía el lujo de la elección.

La muerte los dominaba a todos.

La relación amorosa que no pareció gustarme demasiado, aunque queda relegada a un segundo plano, sigue teniendo cierta relevancia. Es decir, fue ese romance el que desencadenó muchos de los acontecimientos, fueron sus consecuencias las que llevaron a nuestros protagonistas a estar donde están. Karou ha sufrido un cambio increíble, o al menos así me lo ha parecido. Aunque fuera una chica inteligente, decidida y especial ya en el primer libro, aquí madura realmente, sufre demasiado y es más consciente de sus limitaciones y sus actos. Al principio, está totalmente desubicada, todavía incapaz de asimilar todo lo que recuerda de su pasado y lo que le ha sucedido a su familia. Pero poco a poco convierte esa debilidad en fuerza, en parte gracias a sus amigos. Akiva ha decidido que no quiere participar más en una guerra sin sentido, y al principio está desesperanzado porque cree que Karou ha muerto. Su incertidumbre y su miedo van creciendo hasta que se da cuenta de que no es así, y me ha encantado que sufriera y llorara. No, no soy cruel, pero siempre tiene que ser la chica la que lo pasa mal. ¡Vamos a ver!  Rin rin rin~. Aquí siglo XXI llamando. Un chico también puede llorar y sentirse perdido si no sabe dónde está o qué le ha pasado a la persona a la que ama, ¿no? ¡Pues perfecto!

¿Para qué estamos luchando? ¿Para qué estamos matando? ¿Qué ves cuando miras hacia el futuro?

Aunque la historia comienza poco tiempo después de donde quedó el anterior, es cierto que los primeros capítulos son un poco confusos. La autora los llena de incógnitas y nos presenta varios escenarios donde ocurren cosas de forma simultánea. Pero después de estas páginas, en las que me sentí bastante perdida, la acción comienza a sucederse como los churros qué vulgar jaja y te atrapa igual, si no más, que el primer libro. Hay multitud de giros, sorpresas y decisiones que toman los personajes que no me esperaba para nada, lo que, unido a la tensión que se mantiene hasta las últimas páginas por culpa de cierto lobo, me mantuvo totalmente enganchada e incluso un poco obsesionada. No podía dormir porque no dejaba de pensar qué iba a suceder a continuación. Sí, a veces creo que tengo serios problemas xDD.

En resumen, Días de sangre y resplandor es una excelente continuación de su primera parte, Hija de humo y hueso, que sabe mantener al lector atrapado y en tensión hasta el final. Si bien he sufrido mucho mientras lo leía, no puedo dejar de recomendaros esta trilogía de fantasía tan bien elaborada. 

*Gracias a Alfaguara por el ejemplar.