Reseña: El caso de la pistola y el pastel de chocolate

El caso de la pistola y el pastel de chocolate

TÍTULO ORIGINAL: Colin Fisher

AUTORES: Ashley Miller y Zack Stentz

EDITORIAL: Nube de tinta

NÚM. PÁGINAS: 238

PRECIO: 15,90 €

SAGA: -

SINOPSIS

A Colin le encantaría pasar inadvertido, que no le gritaran, que no le tocaran constantemente, que no le obligaran a jugar al baloncesto, que dejaran de hacerle tantas preguntas. Para él no hay nada mejor que observar, sentado en un solitario banco, mientras apunta en su raída libreta roja todo cuanto ve.

El día que se produjo el disparo en la cafetería, en lugar de huir como todos los demás, a Colin le pudo su innata curiosidad de detective y, decidido y emocionado, se acercó al lugar de los hechos. Empezaba, así, el primer caso de su vida...

OPINIÓN PERSONAL

Todos los libros de esta editorial tienen personalidad propia, y en este caso no ha sido diferente. Con una peculiar perspectiva, nos adentramos en una sencilla novela de misterio protagonizada por un alumno de primer curso de instituto, donde la lógica y los sentimientos humanos tienen protagonismo.

Colin Fisher padece el síndrome de Asperger, de manera que detesta el contacto físico, incluso con sus padres, le es muy difícil interpretar las emociones de las personas, no distingue las bromas, dobles sentidos o ironías y por ello, algunos aspectos cotidianos son para él una gran prueba. Vaya a donde vaya, siempre tiene a mano su cuaderno rojo, en el que apunta todo lo que ve, siente o sobre lo que quiere investigar. También tiene unos esquemas con expresiones normales como el enfado o la alegría, que tiene que consultar a menudo para descifrar los sentimientos de los demás. Todo esto le será muy útil cuando, en mitad de la cafetería, se arma jaleo y se oye el disparo de una pistola. Aunque nadie sale herido, Colin es consciente de que traer un arma a un instituto no es algo bueno y está decidido a encontrar al culpable, contando con sus mejores armas: la lógica y la curiosidad.

Como ya os he comentado, Colin es un chico especial. Está en su primer año de instituto y tendrá que hacer frente a gran cantidad de conflictos que había conseguido evitar hasta entonces. Se encontrará con alumnos que lo rechacen y con otras personas que lo aprecien realmente. También se nos muestra lo complicado que puede ser el entorno familiar en casos como éste, ya que los padres de Colin se han tenido que esforzar al máximo por conseguir que su hijo esté cómodo en casa. Aunque ellos se mueran por darle un abrazo, agarrarle del hombro para felicitarle o darle un beso en la mejilla, saben que tienen que avisar a Colin antes, para que no le pille por sorpresa. Pero la relación más complicada de nuestro protagonista es la que se aprecia entre él y su hermano menor, Danny.

El libro nos cuenta un poco el día a día de Colin y sus progresos como detective, siempre desde el interesante y particular punto de vista del protagonista. Me ha sorprendido encontrarme con razonamientos lógicos de acciones cotidianas y espontáneas. Nunca me había parado a analizar todo de esa manera, pero en cierto modo, lo mismo que se cuestiona Colin hizo que pensara en ello de otra forma, para llegar a la conclusión de que los temas relacionados con las emociones en el ser humano, son demasiado complejos como para poder ser explicados a través de la lógica.

En definitiva, El caso de la pistola y el pastel de chocolate es un curioso y entretenido libro, que sigue en la línea de todos los publicados por la editorial. Con un protagonista peculiar y muy inteligente, nos veremos involucrados en un misterioso caso que sólo Colin, con su insaciable curiosidad y su lógica incansable, podrá resolver.

*Gracias a Nube de Tinta por el ejemplar.